miércoles, 4 de febrero de 2009

Pequeño bípedo alado.
El año pasado,en uno de mis viajes "culturales" con la familia nos acercamos a la Córdoba sultana. Después de andar todo el día de aquí para allá nos llevaron nuestros pasos hasta el patio de los naranjos,la antesala de la Gran Mezquita cordobesa. A esto estaba yo absorto en el paisaje de naranjos y fuentes cuando fuí a descubrir a este pequeño bípedo alado, gorrión cordobés,que de forma descarada hurgaba entre las piedrecillas del enlosado con tanto descaro y desparpajo que me volvió a la vida real. Pio.. pío!.Por menos que esto la Santa Inquisión metió a mas de uno en la cárcel por sospechar que mentaban al Papa Pio... Tuvo suerte de ser pájaro.



2 comentarios:

  1. Es bueno ver este pequeño pájaro, no se si sabes que cada vez se ve menos (gracias a los humanos) de ahí la proliferación de plagas de insectos, hacen una gran labor o hacían pues cada vez son menos, una pena...Un saludo cordial amigo Pinastre.

    ResponderEliminar
  2. Hola pinastre, pues a mí me pasa todo lo contrario de Bonavebe. Hay cerca de mi casa dos palmeras y en ellas suelen anidar los gorriones y menudo bullicio arman. Picotean las panochas de dátiles y si pasas por debajo siempre cae "algo". Son aves bastante habituadas a la presencia humana, suelen ser bastante vulnerables, pero donde hay comida... allí suelen estar.

    Saludotes cordiales.

    ResponderEliminar